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bienvenidos, a este blog cursi y berreta, les explico, que yo ahora, les voy a contar que si ustedes leyeron esto es porque son lo suficientemente cursis y raros., pero no se preocupen, porque les tengo la magica solucion...
http://Hoomeecomiing.blogspot.com ahi se curan todo (: graciias ^^

jueves, 9 de abril de 2009


Esas palabras me queman



- ¿Yo? ¿Tu chica?
- Bueno, no exactamente “mi chica” pero…
- ¿pero? –dije tan ansiosa que parecía que lo amenazaba para que me lo digiera.
- Te debo unas enormes gracias. Por eso eres mi chica, pues… eres la chica que…
- ¿Qué? –dije ansiosa y preocupada.
- Que me ayudo.
- ¿ayudarte? ¿a que? Espera… ¿en que momento te ayude?
- Gracias a ti conquiste a una chica –alerta, alerta mátalo, sácalo de tu casa, tiralo por el balcón, asesínalo, pegale un tropada. Mi cabeza no paro de pensar en esas cosas que quería en ese momento. De no ser por mi mama que interrumpió la conversación, lo hubiese hecho.
- Hola Nico… ¿Como estas? ¿Por donde entraste?
- Hola Stella. Gracias estoy bien, ¡entre por el balcón!, espero que no le moleste
- Desde luego que no. ¿interrumpí algo?
- Si, de hecho estaba a punto de romperle la cara de una trompada a Nico. –dije furiosa y con tanta sinceridad que logre que Nicolás y mi madre se fueran.


Cuando por fin se fueron me quede pensando en esa chica, esa a la que había conquistado, mi ataque de celos fue terrible, estaba pensando en disculparme con Nico pero cuando recordaba esa conversación se me ponían los pelos de punta.
Comencé a tararear mi nueva canción y luego empecé a cantarla. Cuándo termine de cantarla empecé a tararear la canción de innocence de Avril Lavigne.
Que me recordó una canción de Kelly Clarkson- Because Of You. (Debido a ti).
Comencé a llorar de la nada y una voz desde el balcón me dijo:

- No debes derrochar lagrimas, son muy necesarias en estos días –Me seque las lagrimas y lo deje pasar.
- ¿y ahora que quieres?
- Nada, lo que pasa es que me olvide de decirte que…
- ¿Qué? ¿algo sobre tu nueva novia? Si es eso, no tengo ganas de hablar.
- No solo quería decirte que tienes una maravillosa voz. –dijo orgulloso y con gran entonación.
- Gracias eres muy dulce –dije con voz tierna. ¡Excepto lo de tu novia! –dije furiosa.
- Ok no te enojes, y apropósito te ves muy linda, ¡My Girl!
- ¿ahora soy tu chica? –cuando todo termine le daré una trompada en el medio de la cara.
- Siempre lo serás –al decirlo tan feliz hizo que sus mejillas quedaran rojas, tan rojas que parecía que se quemaba por dentro.
- ¡hay veces que no se que pensar de ti! –lo abrase de una manera que jamás lo hubiese hecho....pero no quería que se fuera de mis brazos. Era demasiado hermoso para dejarlo ir
- Pues…puedes pensar que soy encantador, iluminador, perfecto, pero…nadie será tan hermoso y perfecto como tu. –me quede petrificada al oír esas palabras. Me dieron ganas de partirle la boca de un beso. Pero las ganas de respirar me ganaron. Cuando logre respirar le pregunte:
- ¿puedo darte algo?
- Siempre puedes, mientras ¡no sea una paliza o una terrible cachetada!
- Entonces… ¿te puedo dar un beso?
- ¡Hay veces que no se que decir!
- En este caso… ¿me puedes decir que si?
- Perdona Dani, de verdad quiero que me perdones pero ahora tengo novia, si me lo hubieses pedido antes… ¡te lo hubiese dado!
- No te preocupes. –lo solté de mis brazos dejándolo ir.
- Pero ¿puedo decirte algo yo?
- Si, ¿Qué? –dije tan decepcionada que mis voz se quebró al hablar.
- Siempre te voy a querer aunque seas la numero 2
- ¿y quien es la numero uno? ¿tu novia?
- Dani, no te enojes ¿si? Pero es mi vida y yo decidí estar con ella y yo la amo. – esa frase “y yo la amo” fue como si me hubiesen apuñalado por la espalda dejándome tirada en el piso sin poder hacer absolutamente nada. Sin darme cuenta empezaron a caer lágrimas de mis ojos, esas lágrimas eran como si me estuvieran pasando una navaja por la cara.
- ¿de verdad la amas? –ya no podía ni respirar las palabras me quemaban la garganta, me ardía tanto que ni podía respirar.
- ¿Dani? ¿estas bien?
- Si, solo que…nada, olvídalo.
- ¿segura? ¿Por qué lloras?
- Por…por nada.
- Dani, te quiero y lo sabes, pero eres mi amiga y nada más.
- ¡Solo tu amiga! Lo se. No es por eso que lloro si no porque estoy feliz por ti, y porque tengo una pestaña en el ojo –mi mentira funciono. ¡Haci que no soy tan mala mintiendo!
- A ver, déjame ver tu ojo –dijo con cuidado y delicadeza. Me observo por unos segundos y dijo:
- No tienes nada, ¿estabas mintiendo?
- No, de verdad tengo una pestaña en el ojo –me arranque una pestaña y sin que se diera cuenta me la coloque en el ojo. Fue tanto la molestia que me la saque. ¡te dije que tenía una pestaña! ¡mira! ¿la vez? ¿la vez?
- Si, de acuerdo, te creo. Me voy Dani. ¡No te metas en problemas! ¿ok?
- Si, si
- Me voy Dani. ¡Duerme Bien! Sueña conmigo…ajaja
- De acuerdo soñare que te estoy tirando por un quinto piso, ¿Qué te parece?
- ¡Mejor sueña con mi hermano! -dijo como si fuera una orden.
- Te veré mañana en la escuela.
- Adiós Nico.


Se despidió y se fue por el balcón. Mire como bajaba y lo saludo con la mano.
Me senté en el borde de la cama y trate de hacer mi sueño realidad, en el cual yo lo tiro de un quinto piso.
Cuando abrí los ojos ya era otro día, lo raro era que estaba lloviendo como jamás había llovido. Era un da horrible, nublado, húmedo y frío.
¡Que horror! Ahora tendré que sacar la ropa de invierno.

- ¡Buenos días Dani! -dijo mi madre mientras habría las ventanas del balcón.
- ¿Buenos días? Ma…esta lloviendo, es horrible
- Antes te gustaban los días de lluvia, apropósito llamaron de tu escuela, hoy no tienes clases. Haci que puedes dormir un rato más. Descansa, lo necesitas.

No hice caso a lo que me decía, pero agarre mi libro favorito y lo comencé a leer.

- Dani, ¿Cuántas veces has leído ese libro?
- No lo se, pero es hermoso
- “el amor en los tiempos del cólera” ¿acaso es tan bueno?
- Si
- A ver, cuéntame de que se trata
Pues…comienza con la muerte de Jeremiah de Saint-Amour, un emigrante haitiano amigo del doctor Juvenal Urbino, uno de los protagonistas de la historia. El fallecimiento de su amigo causa en el doctor Urbino un fuerte sentimiento de que su muerte se aproxima, como una premonición. La evoca el mismo día de su trágico final, recordando el día de su niñez en que su padre le recuerda que llegado a cierta edad, al morir, ni sus hijos lo iban a recordar con la edad de su muerte.
Su esposa, Fermina Daza, fue su acompañante incondicional durante unos 50 años de un matrimonio transformado por la paciencia de vivir juntos tantos años, pues Fermina se casó con Juvenal llena de dudas. Después de la muerte del doctor Urbino en un episodio caracterizado por el estilo literario de Gabriel García Márquez, se presenta ante la viuda Florentino Ariza, un hombre enamorado de Fermina desde hacía cincuenta años, cuando él era joven y ella solo una niña que iba al colegio.
Ambos entablan una relación puramente escrita, que luego se ve truncada por el padre de Fermina, quien al descubrir el romance en que su hija se veía envuelta hace que emprenda un largo viaje de "olvido" hacia la casa de unos parientes en otro pueblo. Pero aún así, y gracias al telégrafo, los jóvenes logran mantenerse en contacto. Al pasar el tiempo y los años, su padre decide que ha llegado el momento del regreso, y es cuando Fermina al regresar y caminando por las calles de su pueblo se encuentra con Florentino; descubre que en realidad no era el hombre idealizado por ella en sus cartas de amor, por lo que lo rechaza y al tiempo conoce a Juvenal Urbino y se casa con él.
Florentino Ariza, al borde del suicidio, es enviado por su madre a viajar y en ese viaje descubre su sexualidad, que procuraba mantener intacta guardando su virginidad para Fermina, por lo que a partir de ese momento empieza a tener aventuras con incontables y distintas mujeres, pero sin lograr olvidar a Fermina.
El tiempo pasa, y los sorprende siendo ancianos. Al morir Urbino, Florentino se presenta en la casa de Fermina para declararle su amor incondicional. Comienza a surgir entre ellos una amistad renovada y madura, hasta que Florentino invita a Fermina a un viaje en barco, donde deciden pasar el resto de sus vidas.

- ¿No crees que es muy largo?
- ¿lo que dije? ¿O el libro?
- Ambas
- No es cierto Harry Potter es mas largo, bueno yo me leí toda la saga incluso la saga de crepúsculo tiene libros grandes, y ami me encantan los libros grandes, y acuérdate que eh leído Romeo y Julieta. Ese es otro de mis favoritos. Deberías leerlos.
- Olvídalo Dani, jamás me veras leyendo algo así de grande y complicado y menos de otra época y nada relacionado con vampiros y magia. Jamás puedo entenderlos. Prefiero El Principito, Caperucita Roja o Blancanieves.
- ¿No crees que son algo infantiles? –dije asombrada por su respuesta.
- No, de hecho tú los leías siempre.
- Si cuando tenia 7 años
- ¿y?
- Y que ya tengo 18 ¿te acuerdas? 18 años. Eso significa que ya estoy grande para esos libros.
- Eso dices ahora, pero cuando tengas…
- No menciones esa palabra
- ¿hijos?
- Si, esa. – detestaba que mi madre pensara en mi futuro, odia que me digiera que iba a tener hijos, a casarme y todas esa cosas cursis que las madres suelen decir a menudo.
- Pero tarde temprano lo tendrás. Eso no lo puedes evitar.
- Claro que puedo.
- Dani, ya cállate
- De acuerdo, pero debes prometer que no planearas mas mi futuro. ¿ok?
- Ok, me voy a la cocina.
- ¡Esta bien!


Se fue y seguí leyendo mi apasionado libro, mi madre tenía razón, ya había leído demasiado ese libro, debía comprarme otro.
Salí con la lluvia hacia la librería, pensé en un libro bueno que no tenga, pero era inútil, tenía demasiados. Cuando llegue a la librería mire a la vendedora y le pregunte por un libro romántico o algo por el estilo.
Pero solo me mostró un libro que ya tenia “El fuego y las cenizas”
Mire toda la librería y por fin vi un libro que me llamo la atención.
Se llamaba “sueño contigo” de
KLEYPAS, LISA. Y otro que se llamaba “El príncipe de mis sueños”, atrás de ese había uno de London, Julia “El seductor seducido”
Los tres libros me interesaban así que los compre a los tres, me salieron algo caros, pero los compre.
Empecé leyendo el de London Julia
Leí lo bastante para hacer un resumen del libro se trataba de que ellos eran amigos inseparables. En los círculos aristócratas de Londres les conocían como los libertinos de Regent Street. Pero la muerte de uno de ellos, Phillip Rothenbow, cambió sus vidas para siempre. Adrian Spence, lord Albright, buscó la paz hasta hallarla en brazos de lady Lilliana Dashell en Un caballero peligroso. Pero ¿qué hicieron el resto? ¿Qué fue de Julián Dane, el eterno compañero de fiestas de Phillip? Julián es el apuesto e irresistible seductor por el que todas las damas de la alta sociedad londinense suspiran. Ni siquiera la tremenda muerte de Phillip ha empañado la atracción que las mujeres sienten hacia él. Julián sabe que podría casarse con cualquiera de ellas, la que él escogiese. Pero su corazón, tan esquivo hasta ahora, está empezando a ser tentado por la única mujer que nunca podrá poseer: Claudia Whitney, la joven que ya conquistó las atenciones de Phillip. ¿Cómo podría Julián seducir a la admiradora de su amigo muerto?

No podía creerlo pero ya había leído la mitad del libro. A la media noche sin darme cuenta lo había terminado.
Al otro día me levante y comencé el día leyendo “Sueño contigo” de Lisa Kleypas.
Fui al baño, me lave los dientes, y baje a la cocina por el desayuno.
Comí unos “Fast food” y salí para la escuela. Antes de subir al volvo me cruce con Nico, lo mire a el y a su hermano Facu, los salude y me fui.

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